jueves, 28 de marzo de 2013

Quien soy

La Hora de ...........


Me llamo José Miguel Martínez Feria, soy de Sevilla nací un 3 de
Marzo de 1974, Mis padres Miguel y Pepi, son de Tabernas y de Lepe
respectivamente, tengo una hermana Maribel, nos llevamos 13 meses.

Al nacer, nací por los fórceps (nací por los pies y me hicieron
daño y estuve sin aire un tiempo, hasta que me sacaron), los médicos
le dijeron a mi madre que no sobreviviría una semana, estuve en la
incubadora un mes, hasta que estuve fuera de peligro. Con año y
medio, mis padres me llevaron a Madrid para que me reconociera el
Doctor Montalvo, que por aquel tiempo era una eminencia en el campo
de la discapacidad, le enseñó a mi madre como debía hacerme la
rehabilitación o psicomotricidad. Así que eso hizo, al llegar a Sevilla,
visitamos San Juan de Dios, que fue un hospital para todos los niños,
donde estuve yendo todos los días durante 8 años.

Mi madre quiso que estudiara en un colegio “normalizado” ya
que el doctor le aconsejo a mi madre que estuviera relacionado con
los demás niños ya que así sería mejor para el desarrollo psicomotor.
Así que me matriculó en el Colegio San Miguel, en un principio le
dijeron a mis padres que estaría una semana de prueba, ahí estuve
hasta que empecé en el instituto.

Durante 18 años estuve yendo a Madrid al Centro de ATAM de
Telefónica, que es un centro donde todos los niños con discapacidad
somos atendidos y los médicos son muy simpáticos y el personal son
muy atentos.

Para mí el escolarizarme en un colegio concertado, en vez de un
colegio de educación especial, supuso el no perder la relación con los
amigos del barrio.

En el colegio San Miguel tuve estupendos y grandes profesores
que aún los visito cuando tengo tiempo. La relación con los
compañeros era crucial ya que de hay dependió que yo me relacionara

bien con ellos y ellos conmigo. En Preescolar la profesora, me decía
que yo les ayudara a leer a mis compañeros, ya que mis padres desde
el primer día me pusieron un profesor de apoyo, donde me daba
una hora donde repasábamos todas las materias y media hora de
psicomotricidad.

Hubo tres cursos que me marcaron para toda la vida, el primero
fue en Segundo con Dña. Maria Teresa que me decía que “te voy a
poner mas derecho que una vela”. Fue en este curso donde empecé a
darme cuenta de que con mi esfuerzo y la ayuda de los demás podría
seguir adelante. En tercero con Don Rafael que fue también un gran
apoyo, ya que ellos cuando hacíamos exámenes me lo escribían para
que yo pudiera ir al mismo ritmo que todos mis compañeros. En ese
curso, quise aprender sevillanas, pero mis padres no podían pagarme
una academia, así que hablaron con la profesora si podría ir a su casa
y así fue, durante un mes aprendí las 4 sevillanas. Cuando terminaba
con mi profesor particular, mi padre ya tenía el coche arrancado para
llevarme al barrio de Los Pajaritos para asistir a las clases de baile,
cuando llegaba a casa, me tenía que poner a hacer los deberes de
clase.

El Tercero en Sexto con los profesores de la Tercera Etapa (6º,
7º y 8ª), donde me enseñaron a luchar para conseguir los objetivos
que todos y cada uno de nosotros luchamos para tener una vida
mejor.

Pero sobre todo tengo que darles las gracias a D. Miguel Ángel
López Caballero que estuvo enseñándome durante casi 20 años a
escribir, leer, y también a controlar los movimientos, el equilibrio y la
estabilidad, ya que me impartía una hora de refuerzo escolar y media
hora de coordinación y rehabilitación.

Durante este tiempo no repetí ni un solo año gracias a mi
esfuerzo y de todos los profesores y sobre todo de mis padres,

también tuve mi gran apoyo en mi hermana, que aún hoy su apoyo es
importante.

Mi relación con los compañeros de clase fue sumamente rica en amistad y afectividad ya que todos nos apoyábamos en todo lo que nos mandaban los profesores.

Ya en el Instituto que es donde termine de formarme como persona. Entré a estudiar administrativo, aquí te exigían 250
pulsaciones por minuto para poder aprobar, yo por mi discapacidad
solo conseguía las 125 pulsaciones por minuto, entonces mis padres
y mi profesor de apoyo fueron a hablar con el director del Instituto
Beatriz de Suabia para que yo pudiera realizar los exámenes en una
máquina de escribir eléctrica en vez de una manual. Gracias a la
profesora de mecanografía que interfirió en el Consejo Escolar, saque
el título en dos años. Entonces yo decidí seguir sacándome el título,
pero la Jefa de Estudios me dijo que no podía seguir estudiando ya
que me amenazó con suspender siempre en mecanografía.

Entonces decidí meterme en Informática en el Instituto Polígono
Sur, el cual lo saque en cuatro años, aquí fue la única etapa en
que repetí un curso. Durante este tiempo tuve un problema con la
profesora de Lengua, que nada más entrar en clase, me dijo que “tu
no apruebas conmigo”. Yo le pregunte que porqué, me respondió que
si yo sabía caligrafía, entonces durante varias semanas me deprimí,
pero gracias a mis padres, a mi hermana, a mi profesor y mis amigos
seguí adelante y conseguí al final mi titulo de Informática.

Al finalizar mis estudios reglados, yo quería trabajar, entonces
me forme en el campo de la Informática, donde realicé varios cursos
de especialización en los campos de diseño gráfico, ofimática,
implantación de redes locales.

Fué en el año 1997 exactamente el 24 de Abril donde empecé a
trabajar en la Confederación Andaluza de Personas con Discapacidad
Física y Orgánica (CANF-COCEMFE Andalucía). Durante este
tiempo me saque el carnet de conducir y me compre un coche.
También me he comprado un piso que es el sueño de toda persona
con o sin discapacidad.

Llevo diez años trabajando en la copistería de la Universidad
Pablo de Olavide, donde tengo buenos amigos y actualmente estudio
primero de grado de Trabajo Social.